
Los saurisquios (Saurischia, gr. "cadera de lagarto") son un orden perteneciente al superorden dinosauria. Aparecieron en el Triásico superior (hace aproximadamente 228 millones de años, en el Noriano) y se diversificaron enormemente durante el Jurásico y el Cretácico; muchos se extinguieron en la extinción masiva del Cretácico-Terciario, pero sus descendientes, las aves, han alcanzado un gran éxito ecológico, colonizando todos los continentes.
Se distinguen por presentar caderas con una forma similar a la de los lagartos, en la que el hueso púbico apunta hacia delante, es decir que la pelvis, vista de perfil, tiene forma triangular. El hueso púbico evoluciona apuntando hacia atrás en el grupo que dio origen a las aves, el grupo llamado Eumaniraptora.
Los saurisquios se diversificaron en tres linajes principales, los terópodos, los prosaurópodos y los saurópodos. Los terópodos fueron los carnívoros dominantes durante la mayor parte del Jurásico y del Cretácico, ocupando el lugar que habían tenido previamente los sinápsidos; algunos, como Allosaurus adquirieron pronto grandes dimensiones y, a finales del Cretácico la línea de los terópodos originó los mayores carnívoros que jamás hayan pisado la tierra, como Tyrannosaurus. Las tendencias evolutivas de los saurisquios se acentuaron, produciendo criaturas de locomoción bípeda, cabeza y mandíbulas muy poderosas y extremidades anteriores muy reducidas.
El otro linaje, el de los prosaurópodos, y posteriormente los saurópodos, se inició en saurisquios carnívoros y bípedos del Triásico, produjo formas que adoptaron un régimen herbívoro y que regresaron a la locomoción cuadrúpeda. Esta línea culminó en las gigantescas formas del Jurásico, como Apatosaurus, Brachiosaurus y Diplodocus, los mayores vertebrados terrestres de todos los tiempos; su cuello era extraordinariamente largo y la cabeza muy pequeña que albergaba un cerebro muy pequeño.