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El Phorusrhacos fue uno de los generos de aves del terror mas reconocidos habitando Sudamerica durante el Mioceno al Plioceno inferior, medía 2,5 metros de alto y era un voraz carnívoro.
Descubrimiento[]
Entre los huesos encontrados en el estrato de la Formación Santa Cruz (ahora considerado principalmente de fecha Mioceno Medio) era el trozo de una mandíbula que Florentino Ameghino descubrió a principios de 1887 y el mismo año en la primera se describe como la de un mamífero desdentado que él nombró Phorusrhacos longissimus. El nombre del género deriva del griego ~ φόρος, (~ phoros), un elemento que significa "portador" en combinaciones de palabras y ῥάκος, (rhakos), "trapo" o "arrugas", probablemente en referencia a la superficie de la mandíbula arrugada. Cuando la derivación original ya no se entendía, se dieron otras traducciones, como la traducción literal de "Trapo-ladrón", y "rama titular" de la suposición errónea el nombre había sido destinado a ser derivado de una rakhis griegos " rama ". El nombre específico significa "muy largo" en latín, de nuevo en referencia a la mandíbula inferior. El holotipo es la mandíbula, espécimen MLP-118 (Museo de La Plata). En 1889 Ameghino enmendado el nombre a una más correcta gramaticalmente Phororhacos pero el nombre anterior tiene prioridad. En 1891, fue reconocido por él para ser un pájaro. Los restos se conocen de varias localidades de la provincia de Santa Cruz, de Argentina.
Modos de caza[]
El Phorusrhacos podía mantenerse escondido entre la vegetación, donde su piel se confundía con el colorido del ambiente, y moverse con rapidez entre los árboles con mucha más agilidad que otras aves, gracias a la forma de su cuerpo. Así, esperaba a su presa, la sorprendía y la ganaba por su velocidad. Se cree que tenía varias maneras de lograr una presa: además de perseguirla en rápidas carreras, podía agarrarla con el pico y luego arrojarla violentamente al suelo, de manera que muriera con el golpe; o bien, si la presa era más grande, usar el pico como arma de precisión, de manera que la parte más puntiaguda se clavara en una parte vital, sobre todo en el cráneo de de su presa.