Era un animal muy extraño, con una cresta en la cabeza y un pico similar al de un pato. Los llamados dinosaurios pico de pato figuran entre las criaturas más curiosas que jamás han existido, no solo por su pico ancho y aplastado, situado en el extremo del hocico, que recuerda al de un pato, sino también por los múltiples adornos que lucían algunas especies. Una de ellas era el Parasaurolophus, que tenía una cresta que podía llegar a medir 1 metro de largo, lo mas interesante era de hecho la cresta gigantesca de estos dinosaurios, era parte de la familia Hadrosauridae.
Características
El Parasaurolophus era un animal bastante extraño, ya que tenía el cuerpo típico de un hadrosaurio pero tenía una enorme cresta en forma de tubo de una gran longitud que servía para emitir sonidos.
Cráneo
El Parasaurolophus tenía un hocico ancho como el de un pato y tenía muchos dientes dispuestos en hileras que podían desmenuzar muy bien las plantas. Este dinosaurio era uno de los pocos dinosaurios con la capacidad de masticar, que al parecer, solo se dearrolló en los ornitópodos.
Se cree que la cresta estaba hueca por dentro y se comunicaba con la nariz y la boca. La cresta de los machos era mayor que la de las hembras. Gracias a ella, el animal emitía sonidos para comunicarse con los otros miembros del grupo. En lugar de emplear la fuerza para establecer la jerarquía entre los miembros de la manada, los Parasaurolophus macho realizaban exhibiciones con la cresta, acompañadas con ensordecedores bramidos. Si observamos un corte transeversal de la cresta de un Parasaurolphus, veríamos las cavidades nasales del interior de la cresta, comunicadas entre sí y con dos salidas al exterior, una por la nariz y otra por la boca. Al soplar fuerte, el aire recorría las cámaras y sonaba como un fuerte bramido. Primero el aire entraba a la cresta, y luego penetraba en una cámara alargada que lo amplificaba para luego ir hacia el extremo de la cresta y volver con una potencia aún mayor. Todo el proceso duraba menos de un segundo.
Se han hallado restos de muchos Parasaurolophus que nos permiten saber ciertas cosas sobre la cresta, como que además de servir para emitir sonidos, también servía para reconocer los distintos miembros de la manada. Se han hallado crestas pequeñas y crestas grandes, y hoy se piensa que las crestas más grandes pertenecerían a los machos y emitirían sonidos más graves, y las crestas más pequeñas serían de hembras y producirían sonidos más agudos; algo similar a las cuerdas vocales humanas.
Durante un tiempo se creyó que la cresta del Parasaurolophus le permitía respirar casi totalmente sumergido en el agua, como si fuera un tubo de buceo mientras se alimentaba de plantas acuáticas mientras la parte trasera de la cresta sobresalía de la superficie. Pero para que esto fuera posible, esa parte de la cresta debería de tener un agujero, pero no era así. Por esto, se rechazó la teoría; pero además, suponiendo que esto hubiera sido cierto, habría expuesto mucho más al Parasaurolophus a uno de sus depredadores, el enorme cocodrilo Deinosuchus.
Patas
El Parasaurolophus podía caminar tanto a dos como a cuatro patas. El Parasaurolophus era especialmente robusto en los hombros y en las patas anteriores, lo que supone que podía correr bastante rápido. La cola larga y plana por los lados era utilizada para nadar mientras escapaba de los depredadores.
Cola
El Parasaurolophus podía mover su enorme y aplanada cola de lado a lado como sin fuera una aleta para nadar. El Parasaurolophus no tenía ninguna defensa contra los depredadores, por lo que usaba su cola para aturdir a los depredadores y luego salía corriendo hacia el agua, ya que nadaba mucho mejor que los terópodos.
Especies
La especie tipo P. walkeri, de Alberta, es conocida por un solo ejemplar bien establecido. Difiere de P. tubicen por tener tubos simples en la cresta, y de P. cyrtocristatus por poseer una cresta más larga y no tan redondeada y un humero más largo que el radio.
P. tubicen, de Nuevo México es conocido de por lo menos los restos de tres individuos. Esta es la especie más grande, con pasajes de aires más complejos en la cresta que P. walkeri y esta en más grande y menos curvada que P. cyrtocristatus.
P. cyrtocristatus, de Nuevo México y Utah, es conocido por tres posibles especímenes. Es la especie más pequeña, con una cresta redondeada y corta. Su tamaño pequeño y la forma de su cresta han llevado a varios científicos a sugerir que representa jóvenes o a hembras de P. tubicen, el cuál vivió en el mismo tiempo y de la misma formación. Según lo dicho por Thomas Williamson, el materia tipo de P. cyrtocristatus es aproximadamente del 72% del tamaño de P. tubicen, cerca del tamaño que se interpreta para otros lambeosaurinos como evidencia de dimorfismo sexual en sus crestas (~70% del tamaño del adulto). Esta posición se ha rechazado en revisiones recientes de lambeosaurinos.